lunes, 8 de septiembre de 2014

Manejo del sangrado en los pacientes tomando nuevos anticoagulantes

Progresivamente, más pacientes se incorporan al uso de los nuevos anticoagulantes en fibrilación auricular crónica. Pacientes de edad avanzada y pluripatológicos que pueden presentar fenómenos hemorrágicos en el transcurso de la utilización de estos fármacos.
Su utilización masiva sin la existencia de un antídoto específico - a diferencia del acenocumarol- es un hecho llamativo. La sobredosificación voluntaria o involuntaria, o el sangrado intercurrente en el uso de estos fármaco debe tener un protocolo de actuación claro; sin embargo, todavía no hay un estándar definitivo.
El anticuerpo monoclonal idarucizumab para el dabigatrán está en fase de aprobación por la FDA. 

En la actualidad, disponemos de una excelente guía editada por el Complejo Hospitalario Mancha Centro: Guia para el manejo del sangrado con los anticoagulantes orales: apixabán, dabigatrán y rivaroxabán.  Su fecha de publicación es de 2013 y anunciaban una revisión en 2014 que no encuentro en su web.

La revisión más reciente publicada me llega a través de la cuenta de David Juurlink @DavidJuurlink farmacólogo clínico canandiense.  
Management of the Bleeding Patient Receiving New Oral Anticoagulants: A Role for Prothrombin Complex Concentrates revisa el papel de estos concetrados, junto a la utilización de la hemodiálisis y otras terapias.
Aunque el sangrado de un paciente que está usando los nuevos anticoagulantes corresponde al ámbito hospitalario, es necesario para cualquier médico que indica y recomienda esta terapia, conocer sus indicaciones y limitaciones. 
El argumento de la comodidad en la sustitución del acenocumarol por estos medicamentos debe ser valorado en todas sus circunstancias. La sobredosificación sin terapia reversible rápida y eficaz bien demostrada es una limitación de primer orden de estos medicamentos. El acenocumarol es fácilmente reversible con la fitomenadiona.

2 comentarios:

  1. Las empresas productoras de esos fármacos han hecho una buena campaña, enfocándose sobre todo en cardiólogos, neurólogos e internistas, ya que conocen las reticencias de los hematólogos a usar un fármaco que no tiene antídoto aprobado. Que sí, que parece más cómodo un fármaco que "no requiere engorrososo controles, no tienes que ir a la consulta del médico de familia o del hematólogo, no te pincharán más el dedo". Parece jauja. Pero claro, ese paciente deja de tener un seguimiento regular y cuando tiene un sangrado, el problema se lo come con patatas el hematólogo, no el médico prescriptor (que, sorpresa, no suele ser hematólogo).
    Por cierto, te aconsejo leer este artículo: http://elrincondesisifo.es/2011/06/23/therapeutics-letter-por-que-el-re-ly-es-digno-de-desconfianza/

    ResponderEliminar