viernes, 24 de junio de 2011

Ilumíname desde las alturas

En la consulta atiendes a personas que se dedican a diversos ámbitos laborales, muchos de ellos de los que no tienes ni idea. Y hace unos días aprendí algo muy interesante de un paciente joven al que atiendo junto a su familia desde hace muchos años.



¿Qué hay erróneo en estas dos fotos de las luces que iluminan mi consulta?
Realmente, apenas había levantado la mirada hacia el techo. Y si lo había hecho no me había percibido de lo anormal que era la existencia de tubos fluorescentes de diferentes colores e intensidades. 
Mi paciente me dijo:
- Doctor Baos: Estas luces que tiene usted en el techo no están bien. Deben ser todas iguales y del color adecuado. Las blancas intensas (luz de día) ya no se hacen y son perjudiciales para la vista.
Levanté la vista y vi, con mis presbíceos ojos, que el mosaico fluorescente era irregular. Entre la bursitis subacromial del hombro izquierdo de cambiar las hojitas verdesrojasblancasrojasverde de las recetitas, el tufo a polvo y papel quemado que desprende la impresora al sacar las hojas y ahora, la luz cenital que ilumina mi conocimiento de mala calidad, van a acabar conmigo.
Mi paciente me explicó, y posteriormente me trajo una hoja resumen, que el tubo fluorescente luz de día no se debe utilizar en centros sanitarios, sino la catalogada como 840, de un color más cálido. Las "marrones" son de ese tipo. Claramente, la empresa que realiza el mantenimiento de mi centro, va cambiando las lámpara según se estropean, y ya sabemos que los fluorescentes duran mucho, provocando este mosaico. El diseño de la consulta no permite tener solamente luz natural, dado que al ser alargada, no llega adecuadamente al interior y produce un excesivo contraste visual con la pantalla de ordenador. Por ello, hay que encender la luz artificial todo el día y todo el año. 
He aprendido algo interesante que no sabía. La relaciones bidireccionales con los pacientes son productivas para ambos y son parte de lo bueno que es ser médico de familia.
Y por supuesto, redactando nota a la gerencia para que den un toque a los de mantenimiento y pongan las luces adecuadas.

4 comentarios:

  1. Hola Vicente,
    crees tu , que con la cantidad de problemas que existen en la salud , te darán bolilla?
    Chau ,
    Silvia.

    ResponderEliminar
  2. efectivamente,los que llevamos tiempo en los mismos cupos, aprendemos de los de detras de la mesa, pesca,albañileria, fontaneria,poesia...siempre he pensado q si alguien quiere obtener una buena informacion de como va la vida se lo pregunten a un medico de familia . un saludo

    ResponderEliminar
  3. Vicente, podrías hacer un wikipotorio recogiendo las barbaridades arquitectónicas /estructurales/de equipamiento de los centros de salud de este país. Podríamos ver cosas muy sorprendentes.

    ResponderEliminar
  4. Cuando hace unos años leí un reportaje relacionado con el tema, intente que me fueran cambiando los tubos fluorescentes que tenía encima de mi cabeza, la consulta era un habitáculo más bien pequeño y no me hacia ninguna gracia.

    Tras mucho insistir no consegui nada, entonces mi opción fue dejar inutilizados 2 de los 4 tubos,para más tarde no sustituir los que se fundían, el electricista me miraba con una cara de estrañeza, como si yo fuera algo rara.

    Por cierto, los tubos en mi centro siguen siendo de luz blanca intensa, ya no se fabricaran pero deben tener un buen Stock con los que no se venden.

    ResponderEliminar