martes, 31 de diciembre de 2013

La despedida, ¿la bienvenida?

Autorretrato esperando el autobús
Foto original de Vicente Baos

Nos gustan los ritos. Nos dan seguridad y nos marcan los ritmos del paso del tiempo. Sin embargo, el continuo de la vida no tiene paradas, podemos echar un vistazo hacia atrás y sentirnos satisfechos o insatisfechos por lo que vivimos; también, cuando miramos hacia delante, podemos soñar, esperar o temer lo que nos depare el futuro. En cualquier caso, hoy 31 de diciembre podremos hacer una despedida y una ¿bienvenida?
Decimos adiós al año donde la redefinición de la sociedad que teníamos, en otra más cruel y más desigual, se ha consolidado. No son solamente por los recortes de las prestaciones sociales que se llevan a cabo. La crisis fiscal y el desplome económico son fruto de las políticas dominantes desde hace décadas. Es un cambio de paradigma hacia el empleado-esclavo, la voracidad fiscal con la clase media y baja y la inestabilidad laboral, o su ausencia, que genera miedo y sumisión. De los jóvenes que buscan un futuro que no se acaba de ver, de los adultos desempleados sin expectativa, de los pensionistas que sobreviven con pensiones mínimas. 
Esta realidad social se describe en reportajes, documentales, noticias aisladas. En los centros de salud sabemos de ella. Cada persona y su drama, somatiza o agrava su patología. Y nosotros, podemos dar algo de consuelo y mucha medicación. Siempre medicación: para soportarlo, para tirar adelante, para dormir algo, para vencer ese cansancio... Nosotros somos la primera línea del sufrimiento humano en este momento. Con las consultas siempre abarrotadas, en el único lugar donde alguien puede ir cuando quiera, a contar que se siente mal, por lo que sea. 
Se va el 2013. Mejor.
¿Algo bueno del 2013? El gran éxito de #NoSinEvidencia

¿Damos la bienvenida al 2014? 
No voy a hablar de esperanza, de "buen rollo", de "coaching barato" tan de moda. No veo nada claro el camino que vamos a seguir, ni en sanidad, ni en la sociedad. No lo intuyo positivo ni que avance hacia un mayor bienestar. En sanidad, haber retrocedido al gasto sanitario de 2007 no augura nada bueno. En mi merma salarial continua y progresiva y en las prestaciones sociales. Trabajar en un centro de salud en el que somos el mismo número de médicos desde hace 10 años, con un incremento de población que nos ha llevado a todos a tener más de 2000 tarjetas sanitarias de clase baja-media con alta frecuentación, no me augura nada bueno. Y así, desde hace muchos años. ¿Y si nos privatizan? Peor aún. Imaginad esa situación con un 20% menos de presupuesto en el centro. Parece un broma cruel. Quieren quitarse los problemas de encima, bajar el gasto mediante el incremento de tu esfuerzo por una menor retribución. 

Vivir en sociedad es vivir con la tensión continua  que se genera entre los distintos intereses y creencias. No existe la Arcadia feliz. La cuerda se tensa y se destensa en una  lucha continua de fuerzas y de voluntades. Aprendamos a vivir así y empujemos con fuerza. Contra la ignorancia y la superchería. Contra los injustos.

6 comentarios:

  1. Triste pero a la vez acertada entrada, Vicente. Pienso más o menos como tú, y sólo puedo esperar que el año que entra nos traiga más de lo que nos merecemos aunque eso sea menos de lo que queremos. Sólo que no soy muy optimista y me conformo con estar mañana a estas horas igual que estoy hoy.

    En cualquier caso, que tengas un feliz 2014 dentro de lo que cabe, y cuando veas que destruyen esa sanidad pública de la que formas parte, recuerda que tus pacientes (y algunos de los que no lo somos) te consideramos un gran médico y mejor persona, y que valoramos el esfuerzo que haces, que va en mi opinión mucho más allá de lo que razonablemente se le puede exigir a un médico de familia. Eres más que eso, y seguro que muchos de tus pacientes no saben expresar con palabras lo enormemente agradecidos que te están. ¿Cómo podría yo agradecer a mi anterior médico, Carlos Casanova, que me salvase la vida en dos ocasiones? Cualquier cosa que le pueda decir se quedaría corta, así que se lo agradecí lo mejor que pude aunque supiese que de ninguna forma podría compensar lo que hizo por mi. Pues contigo me consta que ocurre lo mismo. Mi suegra Inés seguramente no estaría todavía por aquí dando guerra si no fuese por ti, y no es una excepción.

    Por lo que me toca, te diré que gente como tú es la que sostiene el cada vez más precario sistema público de salud, y es que por mucho que los políticos se empeñen en destruirlo, no pueden acabar con la profesionalidad de aquellos que elegisteis el camino del servicio público. Muchas gracias por eso y ánimo, Vicente, no puedo decirte más.

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    1. Muchas gracias por tus amables palabras.
      ¡Qué tengamos todos un mejor 2014!

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  2. Vicente, para el 2014 y siguientes te deseo ilusiones, energías, esfuerzos, satisfacciones, alegrías, decepciones, nuevos intentos, colaboraciones, solidaridad, justicia, amistad, alegrías, superaciones, aprendizajes,....... VIDA!!!!

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  3. Con un año como el 2013 en Sanidad, no va a ser difícil que el 2014 sea mejor!!

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  4. Buen análisis pero triste. Hay una cruzada contra la sanidad pública haciéndola ver como peor que la privada para que todo el que pueda se vaya a la sanidad privada y el echo de privatizarla sea más sencillo.

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